26 de julio de 2010

La Gestión y el Rectorado aprobaron restricciones al Reglamento de Concursos de Auxiliares

En su sesión del martes 20 de julio, el Consejo Directivo de Filosofía y Letras aprobó, con el voto de mayorías y minorías de profesores y graduados (sólo votaron en contra los estudiantes), una serie de reformas al Reglamento de concursos de docentes auxiliares. Lo hizo en pleno receso, sin difusión entre los docentes y estudiantes que son los principales afectados, y con un apuro que llevó a manifiestas desprolijidades en la sesión. La gestión de Trinchero estableció de esta manera un conjunto de cambios importantes a dicho Reglamento. La oposición a estas modificaciones y el reclamo de una postergación de la decisión para poder difundir la situación entre los afectados, fue sostenida por el CEFyL, la representación estudiantil y otras agrupaciones presentes, y por la Agrupación Naranja (actual minoría en la Comisión Directiva de la AGD-Filo). La conducción de AGD Filo, en cambio, que no difundió el problema entre los docentes ni sacó ningún comunicado público antes —ni después— de la sesión, se limitó a justificar las reformas aprobadas por la gestión.

Lo ocurrido en la última sesión del Consejo tenía algo de dejà vu para muchos de los presentes. Ocurre que la gestión de Trinchero ya había intentado votar a las apuradas un proyecto de Reglamento en pleno receso, a fines de 2007. En aquella ocasión la rápida respuesta de la AGD-Filo (entonces dirigida por la Naranja) y la movilización de docentes y estudiantes al Consejo no solo impidieron tal intento, sino que abrieron un proceso de discusión para el rearmado del proyecto, llevando el debate a los departamentos y a la gremial docente, desde donde participamos activamente en su conformación. El Reglamento finalmente aprobado no representa una solución a los problemas de los docentes (ver el documento al respecto que presentó la Agrupación Naranja), pero contiene algunos puntos progresivos que están sujetos al modo en el que se implementen luego los llamados a concurso.

En las últimas semanas, la Facultad recibió un dictamen de la asesoría legal del Rectorado —que no ha sido difundido públicamente— que “rechazaba” el nuevo Reglamento sobre la base de considerar que iba en contra de una normativa del año 1987 (que la gestión de Filo decía desconocer al momento de elaborar su propuesta) y que “reclamaba” la modificación del mismo en tres aspectos: 1) la conformación de los jurados, en tanto el Rectorado considera inadmisible la participación de estudiantes en los mismos; 2) la reducción de los plazos de regularidad a tres años en el caso de los JTP y ayudantes de primera y dos en el de los ayudantes de segunda; 3) la modificación de las condiciones de promoción, en tanto se cuestionó la posibilidad de acceder a un cargo superior por la vía de un informe.

La gestión de la Facultad no intentó, bajo ningún aspecto, defender el proyecto aprobado después de tanto debate y discusión, y se apuró a hacer las modificaciones regresivas solicitadas por el Rectorado. En pleno receso y evitando la difusión entre los afectados (los docentes, que verán reducidos los plazos de regularidad y cerrada la posibilidad de promocionar sin concurso; los estudiantes, que son excluidos del jurado), la gestión modificó el Reglamento, estableciendo que los jurados estarán compuestos por tres profesores y dos graduados o auxiliares (mientras que en la propuesta anterior la composición del jurado era de 3 profesores, 3 graduados y 3 estudiantes), aceptando lisa y llanamente la reducción de los plazos de regularidad y “suspendiendo” por el momento la posibilidad de realizar concursos de promoción. Un Reglamento que había sido el resultado de años de debate y movilización fue modificado en un sentido regresivo, entre gallos y medianoche, y en pleno receso.

La conducción actual de AGD Filo: un silencio cómplice

La completa adaptación a las imposiciones del Rectorado no fue exclusiva de la gestión de la Facultad. La conducción actual de AGD-Filo (Lista Violeta) fue absolutamente cómplice de las modificaciones regresivas impuestas por el decanato. La conducción de AGD-Filo no difundió el problema entre el conjunto de los docentes ni impulsó una convocatoria para discutir el modo de actuar frente a las modificaciones propuestas por la gestión. Lo cierto es que la Lista Violeta, que en su programa para las recientes elecciones proponía “construir puentes de comunicación más fluidos con el conjunto de los docentes”, garantizó la absoluta inexistencia de esos "puentes" durante los días críticos que precedían a la sesión del Consejo Directivo, manteniendo un silencio atronador sobre el problema.

En la sesión, la intervención del Secretario General de la AGD Filo resultó aún más lamentable. Octavio Colombo dedicó la mayor parte de su breve discurso a atacar a la Agrupación Naranja, victimizándose ante el Decano de ser objeto de acusaciones falsas, ya que la Violeta habría “informado de todo lo que sabía a la Comisión Directiva de AGD-Filo”. Más allá de que en la reunión de la Comisión Directiva el Secretario General no informó ni el alcance de las reformas ni la rapidez con las que serían llevadas adelante (todo era tentativo en ese momento), lo que no hizo, claro está, fue informar del problema al conjunto de los docentes de la Facultad, ni difundir la gravedad del asunto, ni convocar a la sesión del Consejo Directivo, como sí lo hizo la Agrupación Naranja.

El resto de su intervención fue aún más penosa: Colombo argumentó, literalmente, que era “imposible hacer nada” dado que existía una “resolución del Rectorado” y un dictamen de un abogado que reclamaba modificar el Reglamento. Que esa resolución es ambigua fue señalado por otros de los presentes en la reunión, pero no por Colombo, que aceptó la interpretación regresiva hecha por el abogado del Rector sin consultar al abogado laboralista de AGD-UBA, ni la posición de los docentes de Filo. ¿Cómo se puede defender así los derechos de los trabajadores?

A continuación el Secretario General justificó los cambios implementados por la gestión festejando que “al menos otros aspectos no han sido cuestionados” por el Rectorado, y concluyó aceptando las modificaciones como un hecho consumado porque “la opinión mayoritaria se ha volcado en ese sentido” (sic). Posiblemente no advirtió la magnitud de su disparate: considerar que la “opinión mayoritaria” son las decisiones tomadas entre cuatro paredes, en pleno receso, por un puñado de representantes elegidos a través de mecanismos antidemocráticos, es propio de quien definitivamente no considera la necesidad de democratizar la universidad en conjunto con el movimiento estudiantil. La frustración de los consejeros del claustro estudiantil, varios de los cuales pertenecen a agrupaciones que apoyaron a la Lista Violeta, hablaba por sí sola: en plena sesión, la conducción de AGD-Filo había manifestado abiertamente su rechazo a reclamar una postergación de los cambios para defender el Reglamento votado el año pasado y sus aspectos progresivos.

Los docentes de la Naranja pedimos la palabra en la sesión y exigimos, en consonancia con lo planteado por el claustro estudiantil, el CEFyL y otras agrupaciones, prorrogar el tratamiento, darle difusión y consultar al abogado laboralista de AGD-UBA para poder defender legalmente el Reglamento de Filo frente a los dictámenes del Consejo Superior.

La AGD-Filo debería haber comunicado la situación a los docentes, llamar a asamblea, movilizar al Consejo Directivo; dicho de otro modo, debería haber puesto en primer lugar la lucha contra las arbitrariedades de las reglamentaciones, que siempre son aprovechadas por las autoridades universitarias para poner en cuestión los derechos de estudiantes y docentes. La conducción de AGD-Filo, la Lista Violeta, eligió sin embargo adaptarse al Rectorado y a la gestión en contra de la participación de los docentes.

Para poder hacer frente a estas maniobras, desde la Agrupación Naranja invitamos a los docentes a participar de las reuniones de la Comision Directiva de AGD-Filo y reclamamos la convocatoria a una asamblea docente para tratar este tema; en ella propondremos trazar un plan de acción para reclamar la anulación de las modificaciones recientemente votadas en el Consejo Directivo.

22 de julio de 2010

Viernes 23: AGD-UBA se suma a la marcha contra la criminalización de la protesta

Contra la criminalización de la protesta social, marchamos el viernes 23 de julio de Congreso a Plaza de Mayo.

En el marco de la campaña que el Encuentro Memoria Verdad y Justicia ha lanzado contra la creciente criminalización de la protesta social convocamos a participar de la movilización que se realizará el día 23 de julio de Congreso a Plaza de Mayo para terminar con la persecución a los luchadores populares.

Al reclamo general por los trabajadores y luchadores populares, sumamos el del inmediato desprocesamiento de todos los estudiantes de la UBA

Concentramos a las 17:30 hs en Plaza Congreso.

NO A LA CRIMINALIZACIÓN DE LA PROTESTA SOCIAL

LIBERTAD A LOS PRESOS POLÍTICOS

CIERRE DE LAS CAUSAS Y ANULACIÓN DE LAS CONDENAS A LOS TRABAJADORES Y DEMÁS LUCHADORES POPULARES.

BASTA DE REPRESIÓN, ASESINATOS Y TORTURAS A LOS JÓVENES EN LOS BARRIOS.



AGD UBA

19 de julio de 2010

La Caja, un robo a nuestro salario. Movilización de AGD-UBA el martes 3 de agosto. Reunión con Rectorado.

(Reproducimos comunicado de AGD-UBA)

Ante la desafiliación compulsiva del 4,5% de la Caja Complementaria, un verdadero robo a nuestro salario, la AGD ha resuelto constituir la próxima reunión de Mesa Ampliada -con la participación de todas las comisiones directivas- y a convocar a conferencia de prensa frente al Ministerio de Educación, el martes 3 de agosto, a las 11 hs.
La Caja, creada por un convenio con la UBA durante la dictadura, está integrada por tres directivos del Ministerio de Educación y otros cuatro de sindicatos que, además, no tienen representación alguna -o es mínima- en el ámbito universitario (Ctera, Sadop, Amet y Uda). Por tal motivo, nos damos cita frente al Palacio Pizzurno y convocamos a las y los docentes a acompañarnos para reclamar que el Ministerio, como parte integrante de ese organismo, promueva la anulación del convenio con la UBA.
Asimismo, este miércoles la gremial mantendrá una reunión con Secretaría de Hacienda de la UBA para plantear, entre otras, esta situación. En la carta enviada para solicitar la audiencia reclamamos que “el Rectorado y el Consejo Superior no sólo no practique retenciones sobre nuestros salarios sino para que se pronuncie inequívocamente contra el convenio con la Caja Complementaria ante el derecho al 82% móvil que conquistáramos los docentes (preuniversitarios y universitarios) y los investigadores”.

18 de julio de 2010

Urgente: sobre la reglamentación de concursos de auxiliares

La semana pasada (es decir, la semana de receso), la Gestión de la Facultad, junto con las minorías de profesores y graduados, aprobaron en una sesión extraordinaria de la Comision de Interpretación y Reglamento del Consejo Directivo (paso previo a la aprobacion en el Consejo Directivo) modificaciones al Reglamento con el que se van a realizar los proximos concursos de auxiliares docentes. Se basaron para ello en la necesidad de "adaptar" dicho Reglamento a las imposiciones y restricciones de un dictamen de los asesores legales del Rectorado, que no ha sido difundido públicamente. Como cuando intentaron aprobar la primera versión de este Reglamento, en diciembre de 2007, sin que hubieran participado los docentes (principales interesados, ya que estaba en juego una alteración de nuestras condiciones laborales) en el proceso de discusión, ahora intentan modificarlo entre gallos y medianoche, sin someterlo a discusión con los afectados y cediendo a presiones y arbitrariedades del Consejo Superior de la UBA.

El Reglamento votado por el Consejo Directivo no representa una solución a los problemas de los docentes (ver el documento al respecto que presentó la Agrupación Naranja), pero contiene algunos puntos progresivos que están sujetos al modo en el que se implementen luego los llamados a concurso. Las modificaciones -según los informe de los Consejeros Estudiantiles y del Director del Departamento de Filosofía-, que pretenden ser aprobadas este martes en el Consejo Directivo, implicarían un paso atrás en al menos tres aspectos (no tenemos información oficial precisa, como no la tienen los docentes afectados):

1) la modificación en la composición del banco de evaluadores
2) la modificación del plazo de regularidad
3) la modificación de las condiciones de promoción.

Nadie fue consultado para llevar adelante estas modificaciones: ni docentes ni estudiantes, ni la AGD-Filo, ni el CEFyL, ni las Juntas Departamentales. Y las modificaciones propuestas afectarían directamente algunos de estos puntos progresivos del nuevo reglamento.

Frente a esta situación proponemos:

1) Que la AGD-Filo difunda entre todos los docentes de la facultad, a través de las listas de correo, el contenido de la propuesta votada por mayoría en la Comisión de Interpretación y Reglamento, para que todos los afectados estemos al tanto de las implicancias de las modificaciones propuestas por la Gestión.

2) La convocatoria a una reunión extraordinaria de docentes este martes 20 a las 11.00. Sabemos de lo inminente de la convocatoria, pero es absolutamente necesario que los docentes tengamos una instancia de participación para discutir esta situación.

3) La convocatoria, por parte de la AGD-Filo, a movilizarse a la sesión del Consejo Directivo, tal como lo están haciendo la mayoría de las agrupaciones estudiantiles, para impedir que se modifique el Reglamento de concursos, ingreso y permanencia de auxiliares sin debate previo y sin la participación de docentes y estudiantes.

4) Solicitar al Presidente de la Asociación de Abogados Laboralistas, Dr. Guillermo Pajoni (asesor letrado de la AGD-UBA) un dictamen jurídico sobre el dictamen UBA, sobre el reglamento tal cual está al día de hoy aprobado y sobre las modificaciones que se intenta imponer.

Desde la Agrupación Naranja llamamos a todos los docentes a participar el martes en la sesión del Consejo Directivo para defender nuestros derechos como trabajadores de la Facultad de Filosofía y Letras.

AGRUPACIÓN NARANJA DE FILOSOFÍA Y LETRAS

3 de julio de 2010

Un balance de las elecciones de AGD Filo

Del 16 al 18 de junio se realizaron las elecciones de la AGD-UBA, en las cuales se renovaron su Mesa Ejecutiva y las Comisiones Directivas de las distintas unidades académicas. La lista Unidad por la Gremial, encabezada por la Agrupación Naranja, resultó ganadora en la elección a Mesa Ejecutiva con más del 68% de los votos: Santiago Gándara, de la facultad de Ciencias Sociales, será el próximo secretario general hasta 2012. En Filo, la Lista Violeta retuvo la mayoría de la Comisión Directiva de AGD-Filo y Octavio Colombo es el nuevo secretario general. La Agrupación Naranja se mantuvo como la minoría.

La Lista Violeta logró mantener su lugar como mayoría de la gremial de Filo en una elección cuyo rasgo más significativo fue que contó con el apoyo indisimulado de la gestión de la facultad, que se jugó desde el primer día de la votación a intervenir para sostener a la Violeta como conducción. Esto no es nuevo: la Lista Violeta contó, desde su creación en 2006, con el apoyo de la gestión de Trinchero y las autoridades de la facultad. En las elecciones de 2008 el decanato había jugado un papel activo en la campaña, promoviendo por diversas vías el voto por la Lista Violeta, y fue notoria para cualquier observador la afluencia de funcionarios y miembros de la gestión el último día de votación.



¿Por qué la gestión apoya a la Lista Violeta?

Este año, en cualquier caso, la campaña tomó proporciones exageradas e incluso tragicómicas (ver aparte, “¿Qué es la AGD?”), que llevaron a un decano kirchnerista miembro de “Carta Abierta” a decidirse a apoyar a una lista integrada por conspicuos miembros de la “izquierda sojera” que apoyó las movilizaciones de la Sociedad Rural. Creemos que no fue casual. El decanato tomó nota de la crítica que la Agrupación Naranja hizo a los mecanismos de aplicación del nuevo Reglamento de Concursos de auxiliares promovido por la gestión y defendidos por la Lista Violeta, así como de nuestra denuncia por la aceptación de los fondos de la minería contaminante y la alineación de Trinchero con los kirchneristas, radicales y macristas en defensa del antidemocrático estatuto universitario y la reelección de Hallú. Mientras los docentes y estudiantes luchábamos en la calle contra la antidemocrática asamblea universitaria en un marco de represión policial, la Violeta eligió distanciarse de la AGD y “criticar” a la FUBA.

Pero la gestión de Filo tomó nota, sobre todo, de lo ocurrido con el principal conflicto docente que tuvo lugar en la facultad en el último período: la huelga de los docentes que trabajan en el Laboratorio de Idiomas reclamando aumento salarial. Todos los participantes de ese conflicto sacaron las conclusiones correspondientes: los docentes del Laboratorio, por un lado, que hicieron una experiencia muy acelerada con la Lista Violeta, que abandonó a los docentes del Laboratorio en pleno conflicto y movilización; la gestión, por el otro, que confirmó que le resulta fundamental contar en la dirección de la AGD-Filo con una lista que no saque los pies del plato.



¿Puede una AGD de la gestión defender a fondo los intereses de los docentes?

La intervención de las autoridades de la facultad en las elecciones de la gremial docente tomó en esta ocasión proporciones tan evidentes que amerita un llamado a la reflexión a todos los colegas. Cualquier balance serio que se haga sobre estas elecciones no puede evadir este punto. La construcción gremial que ha llevado adelante la Agrupación Naranja desde siempre, y que ha permitido construir la AGD que hoy tenemos, sostiene como una de sus bases la necesidad de independencia respecto del decano, del rector y del gobierno. ¿Puede acaso una gremial partidaria de la redistribución de la miseria presupuestaria impulsar una lucha real por el aumento del presupuesto? ¿Cómo podría una AGD afín a las autoridades defender a un docente que sufriera una arbitrariedad por parte de las autoridades? ¿Estaría en condiciones de ir hasta el final en la defensa de los intereses de los colegas sabiendo que eso puede poner en riesgo el apoyo de la gestión a su posición como dirección de la gremial? En los casos en que la gestión de Filo actúa como empleadora directa —como en el caso del Laboratorio de Idiomas— ¿podría una gremial dirigida por la lista que votó el decano apoyar a los trabajadores que enfrentan a ese mismo decano?

Lo que se desprende de esta elección es que la mayor participación y un mayor caudal de votos por parte de la lista ganadora no devienen linealmente en un fortalecimiento, sino que implican el peligro de desvirtuar la propia idea de organización sindical. Como comprenderán todos los compañeros docentes, es un resultado contradictorio sólo en apariencia: porque una gremial cuya dirección ha sido promovida y apoyada de manera tan abierta por las autoridades de la facultad podrá "gestionar" una u otra cuestión que las autoridades estén dispuestas a conceder, pero no podrá estar en condiciones de enfrentar a esas mismas autoridades cuando pongan en riesgo la situación laboral de los docentes; y esa es, en última instancia, la función de un gremio.

La campaña de la Agrupación Naranja planteó un programa y abrió un debate sobre los diversos temas fundamentales de la vida laboral, académica y educativa de Filosofía y Letras. La Lista Violeta, carente de programa, no pudo responder a un solo argumento y eligió el camino de embarrar la cancha con falsas acusaciones de fraude a pocos días de iniciar la elección.

Seguiremos dando el debate con cada uno de los docentes, impulsando la participación, la organización, la movilización. Porque tenemos claro que la penuria presupuestaria y la gravedad de la crisis de la universidad van a poner en movimiento, más temprano que tarde, a los docentes universitarios y que entonces será fundamental contar con una AGD-Filo independiente, dispuesta a impulsar y organizar la lucha, y que supere la política de adaptación y "gestión de lo posible". Conocemos los trabajadores argentinos las consecuencias del sindicalismo "capaz de gestionar" porque es amigo del poder; así nos va con la juventud sindical de Moyano y de Zanola y así le va a la CTA copada hoy por el kirchnerismo, como ayer por la Alianza. Muy pronto, en setiembre, se llevarán a cabo las elecciones de CTA, donde participaremos por una nueva dirección de la central: ¿Con quién estará la Violeta? ¿Con los de Kirchner, con los de De Gennaro y los sojeros, o con el clasismo?

La Agrupación Naranja llama a todos los docentes conscientes que no están afiliados a afiliarse a nuestra gremial y participar en todos los ámbitos de debate, organización y movilización, e impulsar así una herramienta sindical independiente. En particular queremos abrir un debate con un sector de compañeros docentes de la carrera de Historia, que a pesar de sus posiciones enfrentadas con la gestión del decano, decidieron apoyar a la Lista Violeta en las elecciones de la gremial: desde la Naranja seguiremos el debate con estos compañeros en el marco de la pelea conjunta contra las permanentes arbitrariedades de la gestión contra dicha carrera, y en particular con la actual problemática de la implementación de los concursos de docentes auxiliares.

La Agrupación Naranja se compromete a seguir bregando, como siempre lo hemos hecho, por una gremial independiente de las autoridades y el gobierno, por el camino que nos permitió obtener el blanqueo, el 82% móvil, el salario para miles de ad honorem, desde la conducción de la AGD-UBA, la minoría de la AGD-Filo y en todos los ámbitos de organización de los docentes.



"¿Qué es la AGD?"

La Asociación Gremial Docente de la UBA es nuestra herramienta sindical como trabajadores docentes de la universidad, y hace ya más de una década se viene consolidando como el gremio que nos representa y defiende frente a los diversos "sellos" burocráticos (Aduba, Feduba), amparados por el gobierno y otras burocracias sindicales (Yasky, Moyano). La AGD-UBA se ha ganado ese lugar sobre la base de la lucha, la organización, la participación y la movilización, pero sobre todo a partir de una definición clara sobre su carácter independiente de todas las autoridades universitarias, que intentan a través de múltiples mecanismos consolidar la división estamental entre los trabajadores docentes de las facultades.

El título en forma de pregunta no apunta, de todas formas, únicamente a recordar algo de la historia y el carácter de nuestra gremial. Fue, en realidad, una pregunta realizada por una compañera docente en la mesa de votación, inmediatamente después de depositar su voto a Comisión Directiva el día viernes 18 de junio. No habría pasado de ser un despiste anecdótico, o una aparente confusión, de no haber sido porque a lo largo de los tres días de elección ese tipo de comentarios se repitió de manera permanente. "Me llamaron del Departamento para decirme que pasara a votar", señaló otra compañera al llegar. "No estoy afiliado/a, pero me dijeron que estoy en el padrón", fue el comentario de numerosos docentes al presentarse en la mesa. "Me empadronaron el año pasado", señalaron varios docentes cuando los fiscales de las distintas listas le preguntaban si estaban afiliados al gremio, poniendo en evidencia que se referían a las elecciones de graduados. Se llegó a dar el caso de docentes que preguntaban si se trataba de la mesa de "profesores o de graduados" y de un compañero que se presentó en la mesa diciendo que venía a votar "en las elecciones de graduados", y se retiró cuando las autoridades de mesa le informaron que era la elección de AGD y que en caso de no ser docente no podía votar.

Más allá de lo pintoresco de las anécdotas, la reiteración de comentarios de este tipo fue poniendo en evidencia, con el correr de los días de votación, que este tipo de confusiones sobre el carácter de la elección e incluso sobre las características de aquello que se estaba votando no mostraba una "ignorancia" de los docentes sino el evidente peso de las "recomendaciones" de parte de las autoridades de la facultad, que apelaron a todos los mecanismos habituales en elecciones de claustro para movilizar a su "padrón" para votar en las elecciones de nuestra gremial. Se trata de un hecho que amerita una reflexión y un debate acerca de las consecuencias que puede traer para nuestra gremial la intervención de las autoridades y de la política que nos damos para integrar a todos los docentes conscientes para conformar una herramienta sindical independiente, para sumarlos en la construcción cotidiana de nuestra gremial, que no se limita a votar cada dos años sino a sumarse día a día en la militancia para defender nuestros derechos como trabajadores.